En una época donde los trabajos agrícolas y el comercio eran dominados por hombres, María Leonides Disla, o Mamá Liona -como le llaman sus allegados-, se vio en la necesidad de labrar la tierra y poner un colmado con el que, como madre divorciada, sacó a sus cinco hijos adelante, además apoyaba a los agricultores de la zona montañosa El Catey, comprándoles su producción para comercializarla. Ha estado involucrada en organizaciones comunitarias para lograr obras importantes para el desarrollo de su comunidad, como la carretera, iglesia o escuela, llegando incluso a donar los terrenos para la construcción de estas dos obras”.

Origen: Gracias a Dios ayudé con las necesidades del campo