Falleció hoy el papa emérito Benedicto XVI a los 95 años de edad, en el monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano, donde residía desde su renuncia al pontificado en 2013.
La información la confirmó la Santa Sede en un comunicado emitido por el director de la Oficina de Prensa, Matteo Bruni .
«Con pesar doy a conocer que el Papa emérito Benedicto XVI ha fallecido a las 9:34 horas en el Monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano», reza la nota oficial del Vaticano.
La preocupación por el estado de salud del papa y teólogo alemán surgió el miércoles 28 de diciembre, cuando su sucesor, Francisco, reconoció que estaba «muy enfermo» y pidió «una oración especial» a los fieles que asistían a su audiencia general.
El cuerpo del papa emérito Benedicto XVI será velado a partir del lunes 2 de enero en la Basílica de San Pedro, de acuerdo a lo informado por el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni.
“A partir del lunes 2 de enero de 2023 por la mañana, el cuerpo del Papa Emérito [Benedicto XVI] estará en la Basílica de San Pedro para que los fieles puedan despedirse», escribió en la cuenta de Twitter de Vatican News.
El funeral del papa emérito Benedicto XVI se llevará a cabo el 5 de enero, agregó Bruni. El acto fúnebre estará presidido por el papa Francisco.
Según el deseo del papa emérito, su funeral será «sencillo», dijo Bruni.

Biografía

Benedicto XVI, de nombre secular Joseph Aloisius Ratzinger​, fue el 265.° papa de la Iglesia católicanota​ y séptimo soberano de la Ciudad del Vaticano, desde el 19 de abril de 2005 hasta su renuncia el 28 de febrero de 2013.
Comenzó a ser conocido en su competencia intelectual al participar en el Concilio Vaticano II como asesor teológico del cardenal Josef Frings. Posteriormente fue nombrado arzobispo de Múnich y Frisinga y luego cardenal por el papa Pablo VI en 1977. En 1981 fue llamado a Roma para ser prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe por el papa Juan Pablo II, quien años más tarde lo nombró decano del Colegio cardenalicio y, como tal, cardenal-obispo de Ostia en 2002.
Como cardenal de la Iglesia, Ratzinger estuvo presente en tres cónclaves: el de agosto de 1978, el de octubre del mismo año y el de 2005, que resultó en su elección como papa.​
El 28 de febrero de 2013 renunció al papado asumiendo el título de papa emérito, con la intención de dedicarse a la oración y al retiro espiritual. Su renuncia fue anunciada por él mismo días antes, el 11 de febrero, y es una decisión excepcional en la Historia de la Iglesia,​ ya que, si bien el sumo pontífice más próximo que renunció al papado fue Gregorio XII (1415), el precedente de Celestino V (1294) es el único del que puede asegurarse que fue de forma libre y voluntaria.
Tras su renuncia, se celebró el cónclave del que resultó elegido el cardenal Jorge Mario Bergoglio, arzobispo de Buenos Aires, como romano pontífice, que tomó el nombre de Francisco.
Ratzinger hablaba diez idiomas,​ de los que dominó por lo menos seis: alemán, italiano, francés, latín, inglés y español. Además, leía el griego antiguo y el hebreo. Fue miembro de varias academias científicas de Europa y recibió ocho doctorados honoris causa de diferentes universidades, así como numerosos premios y distinciones a lo largo de su vida. Fue un experto pianista y su compositor favorito era Mozart. Fue el sexto papa alemán desde Víctor II y el más longevo de la historia. En abril de 2005 fue incluido en la lista de las 100 personas más influyentes del mundo por la revista Time.

 

¿Por qué renunció el papa Benedicto XVI?

Joseph Ratzinger anunció que se jubilaría como papa el 11 de febrero de 2013 y lo hizo a través de un comunicado.
En su declaración, el papa Benedicto XVI citó a su «edad avanzada» como el motivo para su retiro. Estas fueron sus palabras exactas:
«Después de haber examinado repetidamente mi consciencia ante Dios, llegué a la certeza de que mis fuerzas, debido a una edad avanzada, ya no son aptas para un adecuado ejercicio del ministerio petrino. Soy muy consciente de que este ministerio, debido a su esencial naturaleza espiritual, debe llevarse a cabo no solo con palabras y obras, sino también con la oración y el sufrimiento».
«Sin embargo, en el mundo de hoy, sometido a tantos y tan rápidos cambios y sacudido por cuestiones de profunda relevancia para la vida de fe, para gobernar la barca de San Pedro y anunciar el Evangelio son necesarias tanto la fortaleza de la mente como la del cuerpo, fortaleza que, en los últimos meses, se ha deteriorado en mí hasta el punto de que he tenido que reconocer mi incapacidad para cumplir adecuadamente el ministerio que se me confió.
«Por esta razón, y bien consciente de la gravedad de este acto, con plena libertad declaro que renuncio al ministerio de Obispo de Roma, Sucesor de San Pedro, que me fue confiado por los cardenales el 19 de abril de 2005, de tal manera, que a partir del 28 de febrero de 2013, a las 20:00 horas, la Sede de Roma, la Sede de San Pedro, quedará vacante y deberá convocarse un cónclave para elegir al nuevo sumo pontífice por aquellos a quienes compete».

¿Hubo algún otro motivo?

En aquel momento, muchos especulaban si había alguna otra razón para su retiro además de su edad avanzada, pues años antes se habían destapado casos de abusos sexuales en la Iglesia católica, por los cuales Benedicto XVI pidió perdón en 2010 y prometió hacer más para detener futuros incidentes.
Sin embargo, Federico Lombardi, el entonces portavoz del Vaticano, aseguró que la decisión del papa no se debía a ninguna presión externa.
Asimismo, Lombardi recalcó que Benedicto XVI no se encontraba mal de salud por alguna enfermedad en concreto, «sino de un deterioro y debilidad de su cuerpo, como dijo el santo pontífice en su declaración».