Tegucigalpa, Honduras. La presidenta del Consejo Directivo de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (ProCompetencia), María Elena Vásquez Taveras, afirmó que ante el surgimiento de los mercados digitales el marco regulatorio de muchos países latinoamericanos, incluyendo la República Dominicana, deben adecuarse a los nuevos tiempos en cuanto a la libre competencia, protección de datos, ciberseguridad y otros temas propios de ese tipo de plataformas.
Aseguró que la nueva realidad global obliga a repensar la definición del mercado geográfico debido a que ese concepto responde a la idea de mercados físicos.
Al participar en el Foro Centroamericano de Competencia “RECAC Mercados Digitales y Competencia”, que se desarrolla en Tegucigalpa, Honduras, donde presentó su ponencia ‘’Reflexiones y Experiencias Sobre la Defensa de la Competencia en los Mercados Digitales de la República Dominicana’’, María Elena Vásquez Taveras advirtió también que otros de los grandes retos y desafíos lo constituyen la falta de herramientas tecnológicas por parte de las agencias de competencia para poder perseguir y sancionar las nuevas conductas anticompetitivas que puedan surgir de la dinámica de los mercados digitales.
El evento organizado por la Comisión para la Defensa y Promoción de la Competencia (CDPC) y la Red Centroamericana de Autoridades Nacionales Encargadas del Tema de Competencia (RECAC), además de República Dominicana, participan representantes de Costa Rica, Panamá, El Salvador, Honduras, Nicaragua y Guatemala.
Señaló que fruto de esa realidad la Unión Europea (UE) aprobó la Ley de Mercados Digitales para promover un entorno empresarial más justo a empresas que dependen de los “guardianes de acceso” y que algunas agencias de competencia europeas han realizado cambios normativos importantes para regular los mercados digitales.
Afirmó que, ante tal desafío desde su llegada a la posición, ha iniciado las acciones de lugar con los sectores que inciden sobre el tema y el Congreso Nacional, a fin de lograr el consenso necesario que permita en un corto plazo la modificación de la Ley No. 42-08 de Defensa de la Competencia, para poder adecuarla a los nuevos tiempos.
“La ley de Defensa de la Competencia de República Dominicana fue aprobada en 2008, cuando las tres principales empresas mundiales de capitalización bursátil eran las del sector hidrocarburos, quince años después nos encontramos con otro panorama muy distinto: las principales empresas ya son del área de la tecnología. Nuestra ley no contempla la regulación de mercados digitales e incluso sólo contempla como criterio para determinar el “mercado relevante”, la zona geográfica, elemento no esencial en el ámbito de los mercados digitales”. Manifestó.
Dijo que aunque en América latina todavía no existen normativas actualizadas que contemplen los mercados digitales, eso no significa que no exista preocupación sobre la privacidad y seguridad de los datos.
La funcionaria destacó que la Cuarta Revolución Industrial con la Inteligencia Artificial, el Internet de las cosas y la tecnología del Blockchain apenas están comenzando y que el reto de las agencias de competencia es acompañar esos procesos haciendo grandes ajustes que abarquen desde la promoción, abogacía y la defensa de la competencia.
En ese sentido, recordó algunos indicadores que resaltan el hecho de que, en el 2008, cuando se aprobó la ley de Defensa de la Competencia de República Dominicana, el promedio diario de pagos liquidados a través del sistema electrónico de pagos del Banco Central fue de 4 millones de dólares. En tanto que, en el año 2022, el promedio de pagos alcanzó los 647.9 millones de dólares.