Las palabras amables son como la miel, endulzan el alma y dan salud al cuerpo. (Proverbios 16:24).
Un matrimonio que entienden el poder de sus palabras, aprenden a usarlas para bien, para bendecir, para edificar, para crear sentimientos y lindas emociones que alegren el corazón y traigan paz y sanidad al alma triste, abatida y fortalezcan el amor.
No es necesario esperar fechas especiales, día del amor y la amistad, día del padre/madre, cumpleaños, aniversarios, o que pase algo extraordinario para expresarlas, no cuesta nada decirlas y sin embargo pueden producir vida en quien las escucha.